Seguramente la gamba alistada congelada no tenga la presencia ni la finura de la gamba roja, su hermana mayor, pero es buena sustituta para hacer arroces o fideuàs, para aprovechar sus cabezas y pieles en un buen fondo de cocina. Su tamaño es más pequeño que el de la gamba roja pero a mí me gusta el sabor que deja en todas las elaboraciones. Prefiero usar esta gamba que un langostino que quizá tiene un precio un poco inferior pero de calidad bastante más baja. Hecha con fideos del 0, también se puede preparar con los del 1 y del 2. La fideuà de toda la vida se ha realizado con ese fideo grueso, curvado y con ese agujero que tiene en medio que le impide absorber todos sabores del caldo. Es por ese motivo que yo la cocino con este fideo. No es por estética, es simplemente por sabor.
Como era para una ocasión especial, quise acompañarle con sepia limpia (no pude conseguir sucia por el estado de alarma). Mucha gente me pregunta si es mejor la sepia o los calamares en la fideuà o en un arroz a banda. Y como siempre digo, lo importante es que lo que usemos sea bueno, lo más fresco posible y a poder ser comprado en pescaderías de confianza o de mercados municipales. Pero como siempre digo, esta es mi manera de cocinar que no quiere influir en nadie. Tan solo es mi forma de trabajar y de ver el mundo que me rodea.