La entrada de hoy llevo mucho tiempo queriéndola hacer. Seguro que todos habéis probado el solomillo de cerdo al cabrales. Por ese motivo, he querido hacer una receta parecida, pero cambiando ciertos ingredientes.
En este caso he utilizado dos quesos. El queso Gorgonzola que lleva una porción de queso Mascarpone y el queso Stilton. Son dos de los quesos azules que más me gustan y que más fama internacional tienen. Podéis sustituirlo por otros quesos azules, pero estos le confieren un sabor especial a la receta.
Esta receta mezcla los sabores fuertes del queso con ciertos matices dulces como el mango del queso Stilton y el melocotón rojo. La salsa creada en combinación con el solomillo, hacen de este plato algo muy especial.
Ingredientes:
1 solomillo de cerdo
1 cebolla pequeña
100 gr. de queso Gorgonzolla-Mascarpone
50 gr. de queso Stilton con mango
200 ml. de nata líquida
1 melocotón rojo
Pimienta negra
Sal
El queso Gorgonzola con mascarpone es un producto típico de la región del Piamonte y Lombardía (Italia). Su pasta es blanda. Para su elaboración se utiliza leche pasteurizada de vaca. Su sabor es suave. Este queso nace de la unión del Gorgonzola dulce con el Mascarpone. La mezcla da un queso cremoso, untuoso y fino al paladar, indicado para paladares sensibles a los sabores fuertes.
El queso Stilton tiene su origen en Inglaterra y existen dos variedades, el azul y el blanco. Es denominado como el rey de los quesos en dicho país. El utilizado en esta receta es el blanco, con trocitos de mango y jengibre. Un queso de leche de vaca pasteurizada.
En primer lugar preparamos la salsa de quesos.
Pelamos la cebolla y la cortamos en brunoise o trozos pequeños.
En una olla rehogamos la cebolla con aceite de oliva.
Cuando comience a blanquear añadimos el queso Gorgonzola-Mascarpone y dejamos que se derritan.
Añadimos la nata y dejamos cocinar un minuto.
Agregamos el queso Stilton y dejamos que se derrita.
Dejamos cocinar un par de minutos hasta que todo esté bien derretido y homogéneo. Reservamos.
Limpiamos el solomillo de todas las nervaduras posibles y limpio de pieles.
Cortamos Turnedós de un peso aproximado de 50 gr. cada uno.
En una sartén marcamos el solomillo con un poco de aceite de oliva, al que habremos puesto pimienta negra molida por encima. Lo haremos al gusto de cada uno, pero lo ideal sería al punto. De la misma manera pelamos el melocotón, lo cortaremos en ocho trozos y marcamos la nectarina.
Colocamos en un plato tres turnedós a los que salaremos. Salseamos un poco por encima y colocamos dos trozos del melocotón marcado.
Ya lo tenemos listo para comer. Es conveniente tomarlo cuanto antes para que no pierda todas sus propiedades, aromas y sabores.
Lo podemos acompañar con un vino blanco de barrica o un tinto joven.
Bon profit!
Que delicia de plato, de lujo, para el día de la fiesta, o cumpleaños. Me lo llevo
ResponderEliminarSin palabras, me parece espectacular, todo, la combinación y originalidad de los ingredientes, la preparación y la explicación, y ese solomillo tiene un aspesto maravilloso, un abrazo.
ResponderEliminarEttore
amos a ver hombre de dios( por no decirte otra cosa) pero que has hecho, no es que me guste es que me encanta lo que has combinado, la explicación tooooooodo, amos enhorabuena . un besoteeeeee
ResponderEliminarQué cosa tan buena Ximo XDD si querias que salivara lo conseguiste.. un besazo mi querido Fent!!
ResponderEliminarLa mezcla es de lo más original pero no dudo de que sea deliciosa. Besos.
ResponderEliminarGensanta qué platazo. Me descubro, un plato redondo. Un besote.
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