Bagels con crema de chocolate blanco y negro

Por fin ha llegado el #diadelsuperbocata. En un principio pensé en elaborar una receta macrobiótica ya que comentando con algún que otro blogger así me lo sugirió, pero al final decidí cambiar de idea. Hablando con mi hermano hace unos días, me recordó su estancia en Nueva York y entre otras de las cosas que probó fueron los bagels. Unos panecillos  de origen desconocido pero que la emigración a tierras americanas los ha convertido en muy típicos en los Estados Unidos. Lo que me quedó grabado de lo que hablamos, es que estaban "más duros que una piedra". 

Por ese motivo, investigando, investigando di con una receta que si los prueba, no podrá decir lo mismo de ellos. Los he querido acompañar de chocolate. ¿Por qué no? Contraste de lo salado con lo dulce, ya que estos suelen utilizarse con ambas cosas. 

A su vez, he querido evocar el típico bocata que me traía mi madre a la escuela y que llevaba una barrita de chocolate dentro y que con tanto deseo esperaba cada miércoles de la semana. También recuerdo los bocadillos de nocilla..... Espero que sea de vuestro agrado.

Ingredientes de los bagels:

450 gr. de harina de fuerza

15 gr. de levadura de panadería

125 ml. de leche

100 ml de agua

40 gr. de mantequilla

1 huevo con la yema y la clara separada

2 cucharaditas de sal

1 cucharadita de azúcar

1 huevo batido

Pasas sultanas

Almendras fileteadas

Mezcla en un bol la leche, el agua, el azúcar y la levadura. Dejar fermentar una hora aproximadamente. 

Mientras bate ligeramente la clara de huevo.

Transcurrido el tiempo de fermentación, pon en el bol la harina y la sal. Añade la mezcla fermentada, la yema de huevo y la mantequilla derretida.

Trabaja con ayuda de una espátula de goma, hasta que se hayan conjuntando los ingredientes.

Saca la masa del bol y trabájala durante varios minutos hasta obtener una masa elástica. Haz la prueba de la membrana para saber si ya la tenemos lista. Esto quiere decir que cojas un trozo, hagas una pequeña bola y vayas estirando la masa hasta que quede como una membrana y no resquebrajarse rápidamente. Deja reposar nuevamente en el bol embadurnada con aceite de oliva y tapada, hasta que doble su volumen.

Divide la masa en 8 partes y boléala.

Coge cada bola y hazle un agujero en el centro y ve estirándola hasta que quede como la imagen de la foto.

Colócalos en una placa de horno y cúbrelas con un papel de cocina humedecido.

Precalienta el horno a 200º. Una vez doblado su volumen, pon una olla con agua y cuando empiece a hervir pon los bagels de uno en uno, dándole 30 segundos por cada lado. Retira del fuego y sécalos. Si al introducirlo flota, es que ya ha llegado el momento de hornear.

Coloca de nuevo los bagels en la bandeja de horno y píntalo con el huevo batido y espolvorea por encima con sésamo. Hornea unos 15 o 20 minutos o hasta que veas que esté dorado.

Pon los bagels en una rejilla de horno para que no se humedezcan por debajo. Deja reposar un par de horas antes de consumirlos.

Ingredientes de la crema de chocolate:

250 gr. de chocolate de cobertura

200 ml. de nata para montar

1 cucharadita de azúcar moreno

2 cucharadas de café descafeinado

Trocea el chocolate y resérvalo en un bol. Pon a hervir el resto de ingredientes en el fuego o en el microondas. Vierte la mezcla de nata encima del chocolate y remueve con ayuda de una espátula hasta obtener la crema.

Deja reposar hasta que comience a solidificarse. Introduce en manga pastelera y deja reposar.

Ingredientes para la crema de chocolate blanco:

350 gr. de cobertura de chocolate blanco

200 ml. de nata para montar

Ponemos en un bol la cobertura de chocolate y mientras calentamos la nata en un cazo o en el microondas. Vertemos sobre la cobertura. Con ayuda de una espátula mezclamos bien hasta que se derrita completamente. Una vez templado, introducimos en una manga pastelera.

Corta un bagel por la mitad y con la ayuda de la manga pastelera pon una primera capa con la crema de chocolate blanco con unas cuantas pasas.

Pon una segunda capa con la crema de chocolate negro y coloca unas cuantas almendras laminadas por encima.

Pon el otro trozo del bagel encima y ya lo tenemos listo para comer. Para mi es ideal en la merienda, pero desde luego puedes probarlo en cualquier momento del día. Espero que os haya gustado esta mezcla de viaje neoyorkino y recuerdos de niñez....