Menjar blanc (Manjar blanco)

El Menjar blanc o Manjar blanco en castellano, es una elaboración originaria de tierras catalanas y la ciudad donde más fama ha adquirido es Reus. Este plato, pese a las modificaciones que le he introducido, lo he sacado de un libro maravilloso: El libro de la cocina española, elaborado por Néstor Luján y Juan Perucho, con prólogo de Manuel Vázquez Montalbán, tres de las personas que más investigaron en la gastronomía de nuestro país y que os recomiendo encarecidamente que leáis.

Su origen no está claro, ya que desde el siglo II a.C. se han encontrado preparaciones similares. Existen dos versiones, la salada y la dulce. La primera se elabora con gallina y caldo de este animal, pero la receta que os propongo, es un postre de cuaresma que data de la Edad Media y que sustituía la leche de vaca y los huevos, por leche de almendras. Espero que sea de vuestro agrado. 

Ingredientes:

200 gr. de nueces de macadamia

100 gr. de azúcar

600 ml. de agua mineral

Piel de medio limón y de media naranja

20 gr. de maicena o arruruz

Un palo de canela

2 cucharadas de Amaretto

El Amaretto es un licor que todo el mundo conoce. En la receta original, se nos indica que es conveniente que añadamos a la receta unas almendras amargas, pero yo he decidido sustituirlas, por este licor que aún siendo dulce tiene un punto de amargor.

Ponemos en un robot de cocina las nueces de macadamia junto al agua. Originalmente esta receta usaba almendras sin tostar, pero yo he decidido sustituirlas por las nueces y el resultado para mi ha sido satisfactorio. 

Las trituramos y las colamos con ayuda de un colador muy fino o con la ayuda de una gasa, para obtener una leche de nuez.

Ponemos el líquido resultante en un cazo junto al resto de ingredientes, menos la maicena o el arruruz. 

Cocemos durante unos diez minutos para que se vayan conjuntando todos los sabores. Si lo deseas, puedes poner los ingredientes la noche antes a elaborar la receta para que vayan adquiriendo los sabores con mayor fuerza.

Disolvemos la maicena o el arruruz con unas cucharadas de la mezcla.

Agregamos la maicena o arruruz a la olla y dejamos cocer hasta que coja una consistencia bien espesa.

Colamos para eliminar los restos de canela y las pieles y colocamos en vasitos o en el recipiente que deseemos. Si queremos lo podemos hacer muy espeso y colocarlo en un molde de silicona o engrasado, para después desmoldarlo como si fuésemos a preparar leche frita.

Yo le he colocado una guinda por encima, espolvoreado con un azúcar aromatizada con sabor a toffee y con un trocito de ramita de canela.

Es un postre sencillo de elaborar pero que posee una tradición de centenares de años detrás y que bajo ningún concepto deberíamos olvidar. Espero que lo disfrutéis.