Coca de llanda II con Pimm´s

Sé que algunos pensarán que es una receta repetida, pero si hay algo que me puede definir, es que me gusta perfeccionar las recetas que hago y cuando lo consigo, intento compartirlo con vosotros. Di a probar las dos recetas que tengo de la coca de llanda y aunque las dos gustaron, sin duda esta que os presento hoy, es la que más gustó.

La coca de llanda es una receta muy típica de Valencia y que suele tomarse como desayuno o a la hora de la merienda, acompañado con unas onzas de chocolate. Antiguamente se acompañaba con el denominado Chocolate de Bollo que se elaboraba y aún se elabora en el pueblo de Torrent y que lleva cacao, harina de arroz, azúcar, lecitina y vainilla. Se puede tomar tal cual, rallado o como hace mucha gente, derretirlo en un vaso de leche bien caliente y mojar los trocitos de coca de llanda. 

Otra manera de acompañarla es con mistela o con moscatel. Es una auténtica delicia comer la coca y tener al lado un chupito bien frío de mistela. Como decimos en Valencia, eso es Caneleta en Rama.

Ingredientes:

3 huevos XL

325 gr de azúcar blanquilla

200 ml de leche

200 ml de aceite de oliva

400 gr de harina de repostería

3 sobres azules y tres blancos de gasificante

Ralladura de una naranja

Canela

50 ml de Pimm´s

Su elaboración es muy sencilla. 

En primer lugar en un bol ponemos el azúcar, la ralladura de naranja sin parte blanca y los huevos. Batimos con varillas hasta que comience a blanquear la mezcla. Una vez batida, añadimos los tres líquidos, el aceite, la leche y el Pimm´s y mezclamos suavemente. Por último agregamos la harina tamizada junto a los sobres de gasificantes y añadimos canela. Con ayuda de la varilla mezclamos bien y dejamos reposar durante unos 10 minutos. 

Precalentamos el horno a 150º y mientras vertemos la mezcla en un molde y espolvoreamos azúcar por encima (yo he utilizado uno de siliciona) y dejamos reposar otros 15 minutos aproximadamente.

Metemos en el horno y dejamos cocinar unos 35 o 40´ minutos aproximadamente.

Si vemos que la parte superior se nos queda muy blanquecina, podemos usar el grill para darle un tono más marrón, pero con cuidado de no quemarla.

Sacamos del horno y dejamos reposar hasta que esté completamente enfriada. Desmoldamos y servimos en trozos del tamaño que nosotros deseemos.

Yo la dejaría reposar unas cuantas horas antes de servir, ya que los sabores se armonizarán y estará desde luego mucho mejor. Como veis en la foto, la he acompañado con unas monedas de chocolate que son idóneas para atraer la atención de vuestros hijos ante esta receta, que es sumamente tradicional a lo largo de toda Valencia.

Espero que os guste y la podáis catar, con mistela, moscatel, oporto o un jerez dulce. Será sin duda una experiencia irrepetible.

Bon profit!