Hasta ahora he ido probando a pinceladas los ingredientes que me traje de mi viaje a México, pero en esta ocasión he decidido preparar una receta que lleva muchos ingredientes que le van a dar un sabor y aroma muy peculiares. Es por ese motivo que he cocinado un pollo de corral y usado mole, chile morita, pasta de achiote y chocolate Moctezuma. Como veréis, todo un cargamento de sabores y aromas que será difícil de olvidar si os animáis a preparar esta receta. Si estáis pensando si esta receta pica, pica de verdad. Con el chile morita ya os podéis hacer una idea, pero para un mexicano la verdad es que dirá que nos nada picoso. Vamos allá con la elaboración.
Ingredientes:
1 pechuga de pollo de corral (750 gr.)
100 gr. de anguila de monte
3 cebollas medianas dulces
1 cucharadita de pasta de achiote
2 cucharadas de mole
1 chile morita
1 pastilla de chocolate moctezuma
Sal
AOVE
Cortamos la pechuga en trozos pequeños y los doramos en una olla con AOVE hasta que estén bien tostados. Cortamos en juliana las cebollas y caramelizamos bien.
Agregamos el chile y dejamos que se caramelice más la cebolla.
Añadimos la pasta de achiote, el chile morita, el mole y la sal.
Mojamos con agua y añadimos las setas.
Cocinamos unos 40 minutos a fuego suave.
Agregamos el chocolate y cocinamos 10 minutos más o hasta que esté bien trabado.
Así debe quedar más o menos de textura y color. Dejamos reposar 24 horas para que todos los sabores se asienten.
Transcurrido el tiempo servimos la pechuga troceada acompañada con la salsa. Cuidado a los que les gusta el picante porque esta receta es de altos vuelos, ya que el chile morita como os he dicho, es de los "picosos" "picosos" de verdad.
Bon profit!
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