Sé que esta tortilla para muchos no tendrá en exceso dificultad, pero me apetecía compartirla con vosotros. Para mi hacer una tortilla de patatas o como esta es toda una forma de vida. Es elaborarla con calma, con mesura, haciendo que las cosas se cocinen a fuego lento, con mimo, con cariño. Es como soy hasta que me tocan la fibra sensible y mi fibra sensible en el último año es demasiado fina. Soy un alma libre que necesita pocas cosas para ser feliz, como esta receta, huevos, alcachofas, patatas y unas setas que pululaban por la nevera. Soy de darlo todo, de compartir mis elaboraciones, recetas, conocimientos, pero ya no mi corazón ni mis pensamientos. Están cerrados con llave y quien quiera saber como son le va a costar mucho, porque con el paso del tiempo te das cuenta que vales más por lo que callas que por lo que cuentas. Muchos copian sin citar. Muchos te alaban para adular. Pero yo soy un tipo cercano que no necesita de reconocimientos ni de premios, tan solo disfruto haciendo día a día lo que hago, en silencio, recorriendo camino aunque sea en soledad. Vamos con la tortilla que para eso la he preparado.
Ingredientes:
3 alcachofas
4 patatas medianas
150 gr. de setas
7 huevos XL
AOVE
Sal
Ponemos a mochar las alcachofas cortadas en trozos finos y puestas a remojo en agua con perejil para que no se ennegrezcan. No debe ser una temperatura alta, no más de 70º, ya que de lo contrario se freirían y de la otra manera se confitan. Realizamos esta operación durante unos 15 minutos.
Cortamos las patatas finamente y las ponemos a mochar junto a las alcachofas a fuego bajo hasta que estén bien confitadas.
Cascamos los siete huevos y los batimos ligeramente.
Cuando esté pochada bien la patata añadimos las setas.
Cocinamos un minuto con el fuego apagado.
Escurrimos para quitarle parte del aceite. Ese aceite lo podemos utilizar para guisos posteriores.
Colocamos los ingredientes confitados dentro del huevo batido y añadimos sal a gusto. La que deseemos. Eso dependerá de cada uno, pero necesita que esté un punto sentida.
Mezclamos bien los ingredientes con ayuda de una varilla.
Calentamos una sartén con unas gotas de AOVE. Vamos haciendo que se cocine por ambas caras dándole la vuelta. la dejaremos más o menos cremosa dependiendo de gustos. Yo soy más de dejarla cremosa y no tan seca, pero como digo eso va dependiendo de gustos.
Empatamos y ya la tenemos lista para comer. Dejamos reposar unos minutos para no comerla en caliente y que se asienten los sabores. Si lo deseamos, añadimos un poco de pimienta negra que le otorgará un poco de "vida" a la tortilla.
Acompañarla con un buen trozo de queso, con un poco de mojama o de jamón serrano de calidad. Es una auténtica delicia porque las alcachofas están en su mejor momento del año.
Bon Profit.
Me gustan los ingredientes , tiene que estar buenísima .....
ResponderEliminarAcabo de descubrirla... Inmensa... Aspecto impresionante y tres de los productos con los que más disfruto...
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