Seguramente esta receta la hacéis muchos de vosotros habitualmente. Desde que estudié en el CdT de Valencia la he ido preparando con asiduidad pero siempre ha sido una elaboración que se me ha "atragantado". Me puedo pasar horas y horas en la cocina y no me importa porque me encanta, pero sin embargo la lasaña es algo que me suele costar realizar. Llevaba 7 años sin prepararla en casa y mi familia siempre me recordaba que me salía "buena". Es algo que me da "pereza", pero que creo que a partir de ahora va a cambiar la tendencia. Hoy como era el día de la madre y a petición de la mía, se la he hecho porque madre no hay más que una. Os enseño como la hago yo. No tiene nada extraordinario, solo unos pequeños matices que la hacen como siempre digo "a mi estilo". Espero que sea de vuestro agrado. Ah, espero no volver a tardar tanto tiempo en realizarla.
Ingredientes para 4 personas:
750 gr. de carne picada
1/2 pimiento rojo
1 zanahoria grande
1 ajete tierno
1 cebolla grande
1 puerro
Pimienta negra
300 gr. de tomate triturado
1 cucharada de azúcar moreno
Pimienta negra
Tomillo
Oporto o moscatel
AOVE
Sal
Para la salsa bechamel:
75 gr. de harina
75 ml. de AOVE
Pimienta blanca molida
Jengibre y nuez moscada rallada
100 gr. de queso de oveja de leche cruda
Sal
Cortamos el puerro en brunoise.
Picamos el ajete tierno finamente.
Cortamos en brunoise el pimiento rojo.
Realizamos la misma operación con la zanahoria y la cebolla.
En una olla sofreímos la carnes hasta que esté bien sofrita.
Sofreímos las verduras con AOVE empezando por la más dura hasta terminar por la más blanda (el ajete).
Dejamos pochar 5 minutos y agregamos el licor, el tomillo.
Añadimos la carne picada a la verdura y agregamos el tomate y rectificamos de sal y azúcar.
Cocinamos durante unos 10 minutos aproximadamente.
Cocemos la pasta o la ponemos a remojo según el tipo que usemos. Colocamos las placas en una bandeja y ponemos una capa en el fondo que habremos untado con AOVE.
Preparamos la bechamel. Ponemos en el cazo el AOVE y cuando esté caliente añadimos la leche para formar un roux claro. Movemos con varilla y añadimos la leche caliente sin dejar de mover. Añadimos sal y las especias sin dejar de mover para que no se pegue en la base hasta obtener la consistencia de la bechamel deseada.
Pon el relleno sobre las placas de lasaña.
Vierte un poco de bechamel y coloca otra capa. Realiza la misma la operación con tres capas y terminamos con placas de lasaña.
Ponemos por encima la bechamel y dejamos enfriar en nevera para que se solidifique. Dejamos reposar 24 horas.
Cortamos trozos de lasaña en platos o recipientes individuales. Si lo deseáis le ponéis queso rallado para gratinar e introducimos en horno precalentado durante 15 minutos a 200º con el grill en marcha. Cuando comience a gratinarse lo sacamos y servimos con cuidado. Dejamos reposar unos minutos para tomarlo tibio.
Espero que sea de vuestro agrado y la disfrutéis. Esta es mi forma de prepararla, pero lasañas hay múltiples, como arroces en paella. Acompañar con un buen vino tinto.
Bon profit!
Ximin, una delicia, me gusta lo del queso en la bechamel. Yo la hago muchísimo, con bonito y tomate, o con brocoli o espinacas y langostinos, me chifla, la tuya es más elaborada claro, jajaj, excelente. Estoy segura que a tú mami le ha encantado, bsss
ResponderEliminarYo desde que descubrí el queso en la bechamel, siempre hago así la lasaña y la verdad es que es todo un éxito.
ResponderEliminarProbaremos a hacerla. Nos parece muy bien que la prepararas el día de la madre. Un detalle muy bonito
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